Para qué sirve el título de una presentación
Lo primero que se pregunta la audiencia al leer ese papel impreso con la agenda o recibir ese correo con el planning de la jornada es: ¿esto me podría interesar?
El título es el arma para hacerles pensar que sí.
Debe actuar como una promesa de interés. Debe seducirles para que acudan a tu charla. Debe hacerles pensar que esa conferencia es mejor que todas las otras.
Títulos que no funcionan
Si acudes a cualquier conferencia, jornada o panel de discusión, lo más probable es que veas títulos como:
- Discusión sobre el nuevo impuesto.
- La importancia de las energías renovables.
- Mi intento fallido de coronar el Everest.
Si tienes mala suerte y la agenda está hecha con Arial 8 puede que te topes con algo más extenso:
“El impacto directo que el plástico y los residuos de los países emergentes tiene en nuestra economía local y sus posibles soluciones.”
Todos son títulos “bah”.
Tú no buscas eso. Tú buscas títulos “wow”.
Cómo convertir un título bah en uno wow
Existen tres principios que debes respetar y tres trucos que te invito a probar si quieres que el título de tu presentación o conferencia sea el más atractivo.
Los tres principios son:
1-Lo abstracto es peor que lo concreto
Los títulos genéricos y abstractos tienen poco poder de seducción. Cuanto más específico seas más fácil será que tu audiencia se imagine a dónde les quieres llevar.
2-Dirigirte específicamente a tu audiencia les hará sentir especiales
Si conoces a tu audiencia y sabes que el 90% son ingenieros, usar esa palabra en el título de tu presentación te hará conectar con ellos incluso antes de salir al escenario.
3-Cuánto más corto mejor
Hablo del título.
Los tres trucos son:
1-Muestra el beneficio que conseguirán o el dolor que evitarán
Hazles ver lo que conseguirán cuando reciban la información o lo que podrán evitar conociéndola.
2-Genera curiosidad sin desvelar demasiado
La curiosidad es un must. El título debe incitarles a querer saber más, pero no te pases. No desveles algo que haga que tu presentación carezca de sorpresa.
3-Añade urgencia
La urgencia te ayudará a enfatizar la importancia de lo que dices. Expresiones como: antes de que, hoy, ahora, en 24 horas, todavía o hasta cuándo son comodines que puedes incluir en el título de tu presentación.
Ejemplos de buenos títulos
Antes te hablaba de algunos títulos de conferencia que no funcionan. Y no lo hacen porque violan algún principio o incumplen alguno de los trucos, pero se pueden arreglar para conseguir títulos más atractivos.
Discusión sobre el nuevo impuesto.
Por qué el nuevo impuesto va a hacernos ganar más dinero
Lo he transformado de algo abstracto y sin foco a una afirmación más específica y sorprendente. Los impuestos nos hacen pagar más con lo que es extraño que este nos haga ganar más dinero.
La importancia de las energías renovables.
Energía renovable o muerte inevitable
Además de la rima –que siempre añade gancho a cualquier frase- añado una amenaza en forma de dicotomía. Ahora el título es más concreto y deja menos dudas sobre el contenido.
Mi intento fallido de coronar el Everest.
La peor manera de subir el Everest
En la anterior propuesta se desvelaba un intento fallido. Eso limitaría la estructura y narrativa de la charla al anticipar el clímax. En esta nueva propuesta genero curiosidad –nadie sabe cuál es la peor manera de hacerlo- sin desvelar el resultado final.
5 + 1 fórmulas para crear títulos para presentaciones
No hace falta que te estrujes el cerebro para crear un título para tu presentación o conferencia. Existen técnicas probadas que generan interés y mi sugerencia es que te aproveches de ellas. Aplicando estas sencillas formulas podrás crear títulos atractivos y acertados en pocos minutos.
1-Cómo conseguir algo + beneficio
Esta estrategia consiste en mostrarles cómo hacer o conseguir algo y destacar el beneficio que lograrán al hacerlo.
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2-Cómo conseguir algo + evitar dolor
Muy parecida a la anterior, pero en lugar de acercarles a lo que quieren les alejas de lo que temen.
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3-Pregunta con respuesta desconocida
Es una de las maneras más sencillas de prometer respuesta a un interrogante. También se puede usar la versión afirmativa en la que no se usan los signos de interrogación.
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4-Número + conseguir algo
Los números molan. Es sorprendente cuán más atractivo se puede hacer un título con solo añadir un número delante.
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5-Afirmación espectacular
Es parecida a la estadística impactante que te sugería para empezar tu discurso, aunque no hace falta que sea un dato, puede valer con una simple afirmación.
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Estrategia extra – Descubre el final
Esta es una estrategia algo más arriesgada para aumentar el poder de convocatoria ya que está más destinada a generar un momento aha en tu público que a seducirles para que acudan a la charla.
La idea es usar un título que carezca de significado para ellos…hasta que llegue el final de tu presentación. A la gente le encanta sumar 2+2. No quieren que tú les digas que son 4. Quieren descubrirlo ellos.
El discurso de Steve Jobs en Stanford se conoce como Stay hungry stay foolish que, si bien tiene un significado de por sí, leerlo sin contexto puede generar dudas. A lo largo de su discurso, Jobs explica las distintas cosas que uno debe tener en cuenta para vivir la vida y, al llegar al final, cuenta una anécdota sobre una revista llamada The whole Earth catalogue que, en su última edición y a modo de despedida, contaba con una frase en su contraportada: Stay hungry, stay foolish. En ese momento, es cuando se genera el momento aha y la audiencia se da cuenta del porqué del título.
Respeta estas dos normas cuando elijas el título de tu presentación
1.Una de las cosas que debes respetar siempre es la coherencia del título con el contenido de la charla. No debes usar un título que prometa algo que luego no vayas a dar. Puede que sirva para hoy, pero te dará mala fama para mañana.
2.Si eres de los que usen alguna palabra mal sonante o un humor atrevido. No problemo. Si has construido bien el contexto suele funcionar. Eso sí, no lo hagas en el título. En el título de tu presentación no hay contexto y es fácil que algo bien intencionado se perciba como una grosería. Evita el problema tratando tu título como un lugar donde las madres dejarían jugar a sus hijos.
Ahora ya sabes que el título no es una parte más de tu conferencia. Es una parte importante y debes prestarle la suficiente atención. La buena noticia es que, con las fórmulas que te he mostrado podrás, prepararlo en pocos minutos.
Si en tu próxima presentación usas un título que incumple estos principios o decides que no importa demasiado y delegas la elección en el organizador del evento, no llores cuando el único presente en la sala sea el fantasma de la princesa de hielo que ha venido para reírse diciendo: vagueando, vagueando… acabaste patinando.
2020)
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