La voz de la fobia social: “Voy a hacer el ridículo”, “me quedaré bloqueado y no sabré qué decir”, “se darán cuenta de lo nervioso que estoy”, “se reirán de mí”, “pensarán que soy tonto”. Éstos son algunos ejemplos de los pensamientos negativos en la fobia social.
El trastorno de ansiedad social, también conocido como fobia social, es uno de los problemas de ansiedad más comunes, llegando a afectar a una de cada diez personas (National Institute for Healt and Care Excellence).
¿Qué es la fobia social?
La fobia social se caracteriza por un miedo persistente y desproporcionado a ciertas situaciones sociales (conocer gente nueva, hablar en público, dirigirse a personas de autoridad, ser observado mientras se hace algo, asistir a fiestas, actividades extraescolares, etc.) y un conjunto de expectativas sobre lo inadecuada, ridícula o humillante que será su conducta (me rechazarán o se reirán de mí). La fobia social va más allá de la simple timidez, tanto por el contenido de los pensamientos como por el componente de evitación de los estímulos temidos.
Normalmente son adolescentes que intentan pasar desapercibidos, no llamar nunca la atención, con el fin de evitar enfrentarse a aquello que les da miedo. Cuando se ven obligados a exponerse a situaciones sociales, sufren una fuerte activación fisiológica (taquicardia, sudoración, boca seca, sonrojamiento, tensión muscular, etc.).
Los casos más tempranos de fobia social se presentan a una edad que va de los 8 a los 12 años, aproximadamente, pero encontramos un mayor número de casos entre los 14 y los 17 años. De cada 3 casos, 2 de ellos son del sexo femenino.
Adolescencia y fobia social
La adolescencia es una etapa crítica en el desarrollo social de la persona. En esta etapa de inestabilidad, el deseo de gustar a los demás, ser igual a ellos y “encajar” cobra mucha importancia. El chico o chica comienza a alejarse de los referentes paternos y hace una transición a su grupo de iguales. La fobia social en esta etapa te obliga a sufrir este proceso en soledad, y a generar un progresivo aislamiento del grupo social de referencia.
Consecuencias de la fobia social
Las consecuencias de la fobia social o ansiedad social en la adaptación del adolescente son graves. Este tipo de ansiedad genera interferencias en la vida cotidiana del joven el cual puede acabar desarrollando un bajo rendimiento académico y el abandono escolar, problemas de ansiedad y del estado de ánimo (depresión) , o incluso el inicio del consumo de alcohol o drogas. Normalmente es un trastorno por el que se consulta poco a psicólogos, con lo que entre un 70 y 80% puede acabar desarrollando un problema emocional, y generalizarse en la vida adulta. Los expertos advierten de la importancia de la identificación temprana de este trastorno de ansiedad.
Tratamiento de la fobia social
Los adolescentes con un problema de fobia social reciben un tratamiento psicológico estructurado y sistemático a través de las Terapias Cognitivo-Conductuales. En el tratamiento se ayuda al joven a desarrollar las habilidades personales necesarias para enfrentarse a lo temido con unas nuevas herramientas que aprende a poner en juego, con el fin de desarrollarse de manera eficaz en dicha situación. Ello afecta indirectamente a su nivel de autoestima y su concepto de autoeficacia.
El éxito consiste en vencer el temor al fracaso (Saint Beuve)
Rescatado de 2022 Psicología CAPIA -
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